El pasado día 2 de septiembre he tenido una de esas experiencias vitales que puedo contar.
Después de una mañana complicada por la situación de la resolución de un contrato vital para mi recién estrenada empresa Iluminaciones Blancas, decidí olvidarme por unos momentos y bajar desde Villatobas a Aranguez aprovechando el buen tiempo en moto a realizar dos compras, una para mi hija Sara y para el proyector de mi cuñado.
Cuanto terminaba mis gestiones el cielo se comenzaba a cerrar y parecía que iba a llover, yo pensaba para mis adentros que rabia, porque iba en moto y al final me iba a mojar, pero según me acercaba a Villatobas el cielo se volvía a abrir, un pequeño respiro.
Al aproximarme a la incorporación de la AP36 sentí una sensación de angustia como nunca antes había vivido, en el horizonte contemplaba una Tormenta de Arena que parecía engullir todo lo que encontraba por su paso, reconozco que me asuste, incluso pare la moto y grabe unos instantes con el movil la imponente tormenta que tenia frente a mis ojos, nunca había visto nada parecido y no me abandonaba la sensación de que traía algo maligno.
Volvi a subir en la moto y con el miedo de no llegar a un resguardo y la tormenta me pudiese tirar de mi montura, acelere hacia Villatobas.
Llegue a la oficina y guarde la moto la Tormenta estaba casi golpeando el pueblo, en ese momento apareció Pedro Adolfo y estuvimos hablando del concurso de Iluminación de Villatobas, en un momento la Tormenta incremento su fuerza y nos despedimos...
Fue en ese momento en el que sentí la muerte mas cerca de mi, latigazos en pecho, brazos, ingles, y cuerpo en general, es como si me estuvieran dando latigazos invisibles y con un dolor inexplicable que apenas me permitía moverme. Intentaba montarme en el coche y era imposible el dolor no me permitía sentarme en el asiento. Por encima de mi notaba la virulencia de la Tormenta que estaba pasando por Villatobas, recuerdo ver la caída de un árbol, mientras sacaba el coche de la oficina de esa manera, que solo se explica por las ganas de vivir, ya que los dolores eran horribles.
Linea de Vida
Fue en ese momento cuando recibí la llamada de mi cuñada Sonia para que le ayudase a configurar un Iphone nuevo para su madre, decidí no contarle nada de lo que me estaba pasando y utilizar esa llamada como un cordón de vida (en los barcos cuando navegas con mal tiempo siempre tienen una linea de vida para no acabar en el mar) Y decidí que Sonia seria mi linea de vida, la iba contestando sin coordinar si mis repuestas eran correctas o no, solo quería oír su voz y que me diese fuerza suficiente para llegar conduciendo a la casa de mis suegros que es donde estaban mi mujer Paloma y mi hija Sara.
Cuando llame a la puerta apareció ante mi Paloma, en ese momento ya tenia otra linea de vida, mi mujer y mi hija, aunque yo era consciente de que ese momento iba muy mal, le di el movil y le dije "no es broma estoy muy mal, necesito beber, dame agua o Coca-Cola, lo que sea". En un primer momento me tranquilice al estar rodeado de mi mujer pero seguía con la sensación de estar perdiendo mi energía vital por momentos y de hecho recuerdo que dije que se llevasen a Sara para que no me recordase asi.
Llamaron al 112 primero apareció una ambulancia y me tomo la tensión y cuando dijo que estaba bien el primero que pensé que me moría era yo ya que no recuerdo mi tensión bien nunca. Apareció una segunda ambulancia una UVI y ante la gravedad me montaron en la misma, minutos antes cambiaba mi Linea de Vida, la doctora que me iba a atender en este trance llevaba al cuello una medalla en oro y bastante grande de la Virgen del Rocío y se cumplían 18 años de la muerte de mi padre, para mi fue un mensaje de mi padre desde el otro mundo para que me tranquilizase y de que de esta no moría. Fue mi siguiente Linea de Vida, me cambio el humor y me dio fuerza para afrontar todo lo que vendría después con paz de espíritu y sabiendo que no me iba a morir.
En la ambulancia a toda velocidad dirección a el Hospital de Toledo, en un momento dado la Medico le pide al conductor que pare "lo perdemos" al escucharlo yo solo se contestar "vamos! como me vais a perder si solo vamos tres en la ambulancia" mi humor era una manera de afrontar mis ganas de vivir frente a la muerte.
Llegando al Hospital un frenazo y un golpe con algo contundente en mis partes, que me ayudo a estar pendiente de todo lo que pasaba a mi alrededor, Todo se paraliza en mi memoria, supongo que ya llevaría medicación como para tumbar a un elefante, pero recuerdo dos momentos Cuando el medico me dijo lo complicado de la operación y mi gravedad, recuerdo que agradecí su trabajo y el de su equipo que tuvieran suerte que eso seria bueno, para mi. No quise la extrema unción ya que seguía pensando que no me iba a morir la Virgen del Rocio y mi padre me protegían. y cuando vi a Paloma con mi cuñado preocupados yo les hablaba de que no me iba a morir e intentaba dar instrucciones sobre las camisas y camisetas de la Peña que yo me había encargado.
Momentos posteriores todo se fundió a negro, y pasaron 6 horas hasta que volví a ver la luz, lo sabia, estaba VIVO, no estaba desorientado, sabia donde estaba solo quería agua y ver a mis seres queridos.
Ahora me toca recuperarme de mis heridas y volver a estar operativo lo antes posible. He muerto y he vuelto a la vida, toda un oportunidad única que agradezco.
Muchas Gracias, a todos los que se han preocupado y han seguido mi evolución , un abrazo a todos hasta pronto.




